miércoles, 14 de agosto de 2013

CULMINA LA SEGUNDA FASE DE OBRAS EN LA CAPILLA SACRAMENTAL


Desde la noche del viernes, Jesús de la Pasión y María Santísima del Amor Doloroso ocupan de nuevo sus respectivas hornacinas en la Capilla Sacramental, toda vez que ha terminado la segunda fase de las obras de conservación y mejora iniciadas a mediados de julio. Como se informó con anterioridad, la actuación primera consistió en la restauración y mejora de la reja mientras, que, en esta segunda, se ha procedido a la instalación de una nueva red eléctrica tanto en los Columbarios como en la propia Capilla, destacando en ésta la disposición de focos de tecnología LED que serán regulados por la empresa especializada en esta misma semana. Igualmente se ha procedido a pintar todos los espacios manteniéndose los colores originales, se ha ampliado el suelo de la hornacina principal con vistas a su futuro cerramiento, se ha pulimentado y abrillantado de la solería de mármol así como se ha llevado a cabo una cuidadosa limpieza de sedimentos del retablo. Igualmente y como consecuencia de la remodelación del camarín, van a instalarse nuevos columbarios ubicados en un lugar de excepción: justo debajo de la peana del Señor. Una vez se hallan dispuestos, informaremos tanto de su número como capacidades exactas para ponerlos a disposición de hermanos y cofrades interesados.

Podría existir más adelante una tercera fase de estas obras, pues se está a la espera de culminar el estudio económico que posibilitará el cerramiento del camarín principal con una estructura de madera tallada, dorada y policromada que sigue estilísticamente las trazas del retablo. El proyecto, diseñado por nuestros hermanos Raúl Trillo y Salvador Lamas y aprobado incialmente por la Junta de Gobierno, se dio a conocer en la última Hoja Informativa enviada en junio.

Con esta última actuación culminaría todo este ambicioso proceso de restauración integral de nuestra Capilla que ha supuesto para la tesorería de la Archicofradía un importante desembolso económico, con la intención de que el lugar donde se veneran nuestros Sagrados Titulares presente siempre el mejor estado posible.